Una controvertida decisión del alcalde de Chillán, Camilo Benavente (PPD), llamó la atención en los últimos días, particularmente por el timing: resolvió terminar un acuerdo protransparencia con Contraloría en medio del último tramo para adjudicar una millonaria licitación que permitirá el recambio de luminarias led en la capital de Ñuble.
En abril de 2022, la Contraloría Regional de Ñuble y la comuna firmaron un convenio de colaboración -precisamente a petición del jefe comunal- para la revisión jurídica de los procesos, en particular respecto a las licitaciones de gran envergadura.
Sin embargo, la polémica inició en mayo pasado, cuando Benavente decidió unilateralmente cancelar el trato, el que oficialmente fue dado de baja el viernes 16 de junio recién pasado.
No se trata de un asunto baladí, en especial por el pasado reciente de dicha comuna, que fue una de las que hizo estallar la trama de corrupción del caso LED, durante la administración anterior, y que terminó con dos funcionarios municipales y un concejal formalizados por cohecho.
Casualmente, el mismo día que oficialmente se derrumbó el pacto entre municipio y Contraloría, en la prensa local empezó a circular el nombre de la empresa ganadora: la española Elecnor Chile S.A.
Lo anterior, pese a que aún falta el visto bueno del concejo municipal para que sea oficial.
Por estos días, el concejo municipal se encuentra realizando las últimas revisiones para adjudicar la instalación de 12.500 luminarias, que terminarán por cubrir con luces led toda el área urbana de la comuna. Se trata de una licitación importante, cuyo presupuesto supera los 3.800 millones de pesos.
Ayer lunes, los detalles del contrato fueron expuestos por la comisión técnica al concejo en pleno y se espera una segunda sesión este jueves.
Hoy martes, en tanto, a partir de las 10 de la mañana habrá sesión de concejo. Si bien no será votada la licitación en dicha instancia, el concejal Joseph Careaga (UDI) consultará sobre esta criticada decisión del alcalde.