Los últimos hechos se enmarcan en el aviso de “alerta roja”, hecho por el Ejército durante el miércoles, que implica un refuerzo en personal y elementos de combate.
Los ataques no cesan en la región de La Araucanía: en horas de la noche del miércoles se registraron disparos en contra del tren de carga que se trasladaba por el sector de Pidima, en la comuna de Ercilla. Además, se quemó una camioneta en la misma línea férrea. A ello se suma la quema de otro vehículo en la ruta que une Victoria con Curacautín, también ocurrido durante la noche del miércoles.
Lo último: en horas de la mañana de este jueves se informó de otro ataque en la Ruta 5 Sur, en la provincia de Malleco. Las fuerzas de orden del lugar habrían hecho un llamado por “atentado“.
La reiteración incesante de estos hechos ocurre luego de la toma de gendarmes como rehenes en la cárcel de Angol, que terminó con el traslado de los comuneros mapuche que los detuvieron contra su voluntad: dos de ellos fueron llevados a Rancagua, en la región de O’Higgins; otros dos a Concepción, en la región del Biobío; y otros dos a Puerto Montt, en la región de Los Lagos.
El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, dio cuenta del estado de las cosas: a tal gravedad han llegado estos hechos, que el “jefe de la Defensa Nacional desplegado en la Macrozona Sur ha declarado que, en términos de definición de riesgos, es una Alerta Roja. Eso significa que hay un 50% del contingente en la zona que se despliega para cumplir labores de control y fiscalización”.
Además del aumento de la dotación uniformada, se trasladarán a la zona dos helicópteros, los que se sumarán, también, al envío de mayor cantidad de vehículos blindados. “Esperamos que el lunes 15 de mayo esté un tercio de las capacidades (del recinto) para que un tercio de las fuerzas militares se puedan desplegar en la zona”, dijo Monsalve.
Con todo, ñas comunidades mapuche de la zona han hecho aviiso que los ataques continuarán: así lo señalaron en una movilización de mujeres en el sector de Arauco.