El asesinato del cabo primero Daniel Palma —hoy suboficial mayor tras ser ascendido de manera póstuma por Carabineros— fue el tercero que lamentó la institución policial en poco más de tres semanas. En 23 días, antes de él, fueron asesinados el cabo primero Álex Salazar y la sargento segundo Rita Olivares.
Todos ellos fallecieron en un operativo, pero el crimen de Palma ocurrió en un contexto desafortunado, que comenzó la noche del 5 de abril en las cercanías del Teatro Caupolicán, donde hubo un aviso de disparos en la intersección de la calle Coquimbo con San Diego, en Santiago Centro, lo que marcó los últimos minutos de vida del reciente mártir de Carabineros.
Esos disparos fueron efectuados por un grupo de presuntos antisociales que estaban a bordo de un vehículo azul marca Chevrolet, el cual le arrendaron a un militar retirado del Ejército y que había sido utilizado para cometer otro asalto a finales de marzo, en un sector de Vitacura.
A bordo de ese automóvil se sospecha que estaban Carlos Cortez Florez, Luis Lugo Machado y Ovimarlixion Garcés Briceño —todos de nacionalidad venezolana—, quienes dispararon presuntamente para cobrar el arriendo de una pieza ubicada en la zona.
En medio de su escape durante el operativo policial, los sujetos se encontraron de frente con Palma. El carabinero ni siquiera alcanzó a realizar la respectiva fiscalización cuando recibió dos tiros en su cabeza que resultaron mortales.
Cuatro días después del asesinato, los esfuerzos de la Fiscalía Centro Norte comienzan a dar sus frutos, pues Lugo Machado, quien le habría disparado al funcionario, y Garcés Briceño fueron detenidos.
Ambos sospechosos fueron detenidos al interior de una vivienda ubicada en calle Nueva Imperial, en la comuna de Quinta Normal, Región Metropolitana, en la madrugada de este lunes 10 de abril. En esa casa había una persona que funcionó como «encubridora», así que fue trasladada al cuartel del OS-9 de Carabineros para que prestara declaración, lo que fue clave para el procedimiento.
El primero en caer fue Ovimarlixion. Al sujeto se le tomaron las huellas y estas habrían concordado con las que se encontraron al interior del Chevrolet azul. Cabe mencionar que registros audiovisuales habrían corroborado su presencia en el lugar del asesinato.
Minutos más tarde, como las unidades del OS-9 de Carabineros encontraron el pasaporte de Luis Lugo al interior de ese domicilio, los policías se quedaron en la zona como punto fijo, logrando la detención del presunto autor material del crimen.
Oficialmente, según los registros, Lugo Machado vive en Concepción, en la región del Biobío. Desde el 30 de marzo de este año que posee una orden de detención pendiente, porque no asistió a una audiencia judicial en su contra.
Dicha audiencia surge por un hecho delictual de 2021. A mediados de ese año fue detenido por su autoría en dos delitos: microtráfico de drogas y porte ilegal de armas de fuego y munición. Todo esto ocurrió en la comuna de Penco, en la misma región de residencia. La justicia deliberó dejarlo en libertad vigilada.
Por el momento, Carlos Cortez Florez sigue prófugo de la justicia.