Durante la jornada de este martes, el Presidente de la República, Gabriel Boric, presentó en La Moneda la Política Nacional contra el Crimen Organizado, un programa con la que se espera mejorar en materia de seguridad.
En la instancia, el Mandatario destacó que «estamos presentando un plan estratégico y una hoja de ruta que se hace cargo con acciones, metas y con recursos de un vacío que teníamos como país en la lucha contra las organizaciones criminales, nacionales e internacionales, que operan o pretenden operar en nuestro país«.
«Tenemos que actuar todos en pos de un bien común, salir de la pelea chica, la lucha contra la delincuencia y el crimen organizado, tiene que ser una política del Estado donde todas las instituciones y todas las tendencias políticas, cualquiera que estas sean, estén detrás de un objetivo, que es garantizar la paz de todos los chilenos», agregó.
En ese sentido, resaltó la importancia de que las instituciones competentes en esta materia trabajen de manera mancomunada.
Ejes del plan
El jefe de Estado señaló que la Política cuenta con algunos ejes como:
- Fortalecimiento institucional e inteligencia del Estado, mejorando la coordinación respecto al intercambio y análisis de información, así como la capacidad de articular acciones conjuntas.
- Desbaratar la economía del crimen organizado, con una mejor respuesta estatal en prevención, detección, persecución penal e incautación de los beneficios obtenidos por el crimen organizado y en la lucha contra el lavado de activos.
- Disminuir el poder de fuego de las organizaciones criminales, mediante el fortalecimiento de los sistemas de detección y persecución de su tráfico ilegal y actualizando la legislación sobre tenencias de armas.
- Abordaje del crimen organizado en los recintos penitenciarios, previniendo su operación, el reclutamiento de nuevos integrantes y el contagio criminógeno entre personas privadas de libertad.
- Agenda Legislativa para mejorar la detección, investigación y persecución del crimen organizado, con una actualización del marco normativo.
- Actualización de equipamiento y tecnología, para que las instituciones competentes en la detección, persecución y desbaratamiento de las organizaciones criminales puedan contrarrestar la capacidad adaptativa de estas.
- Formación institucional y de capital humano de quienes enfrentan el crimen organizado para abordar sus dinámicas particulares y nuevas tendencias.
- Prevenir la corrupción en instituciones públicas, para que estas no sean permeadas por las acciones de las organizaciones criminales.
- Aumentar la eficacia para enfrentar el crimen organizado mediante la reforma policial, incorporado en ella objetivos específicos para este fin.
- Fomentar la cooperación y coordinación internacional, optimizando los esfuerzos conjuntos y multinivel con otros países.
«Tenemos el deber de recuperar los espacios públicos tomados por el narco y no vamos a permitir que este y otro tipo de delitos, como el tráfico de migrantes, el contrabando de armas, la ciberdelincuencia, pongan en jaque la seguridad y tranquilidad de familias chilenas», dijo en la oportunidad.