En el marco de un conversatorio con vecinas y vecinos de Peñalolén, el Presidente Gabriel Boric anunció cuatro proyectos de ley para enfrentar la crisis de seguridad que atraviesa nuestro país.
Dos de las iniciativas apuntan a aumentar las penas contra quienes cometan delitos de secuestro y contra quienes porten armas en lugares concurridos. Otra busca dar facultades a Gendarmería para que pueda ser parte de las investigaciones, y la cuarta busca regular la persecución penal del sicariato.
Boric aseveró que las ministras Carolina Tohá (Interior), Ana Lya Uriarte (Segpres) y Marcela Ríos (Justicia) estarán impulsando las propuestas en el Congreso.
«Sabemos que la seguridad es condición habilitante para poder hablar de cualquier otra cosa. Si no somos capaces de mejorar la seguridad, de recuperar nuestros barrios, nuestros espacios públicos, difícilmente vamos a poder hablar con la profundidad que se requiere de las grandes reformas que tenemos pensadas», señaló el jefe de Estado.
Además, advirtió que “el tipo de delitos han cambiado en Chile y eso es algo que preocupa. Y por lo tanto, tenemos que ser capaces de adecuar nuestra legislación”.
Luego dio a conocer los proyectos, explicando que con el primero buscan agravar «las penas en los delitos de secuestro. El secuestro no es un delito al que en Chile estemos acostumbrados. Sin embargo, hemos visto cómo poco a poco se ha ido instalando. Y no vamos a permitir que se naturalice”.
«Quiero ser muy claro y decirle, a quienes están pensando en llevar adelante esa terrible práctica que es el secuestro, que los vamos a perseguir, los vamos a encarcelar y las penas van a ser duras”, añadió.
En segundo lugar, el Presidente informó que «estamos aumentado las penas a quienes porten armas en lugares concurridos. ¿Qué anda haciendo una persona con armas ilegales en lugares concurridos si no es planeando maldades?».
«Hoy no está bien regulado eso en el código. Y, producto de una serie de circunstancias, se puede terminar con una sanción ínfima», acusó.
Además, el Mandatario aseveró que “no queremos más armas en Chile. No queremos que los delincuentes tengan armas en Chile, no queremos que sigan circulando tantas armas. Por eso, no tenemos un plan más seguridad, menos armas».
«Pero además, a quienes pillemos con armas en espacios públicos, en las calles, en los parques, en los centros comerciales o en las ferias, van a quedar con pena de prisión. Y eso es importante, porque no vamos a naturalizar en nuestro país, que los problemas o diferencias entre personas se resuelvan a balazos», complementó.
En tercer lugar, el gobernante del país apuntó a los crímenes que se gestionan desde las cárceles. «Estamos mejorando las tecnologías de las cárceles, para inhibir y bloquear totalmente las señales de celular al interior de las cárceles. Pero además, estamos otorgando facultades a Gendarmería para poder ser parte de las investigaciones, hoy día no tiene esas facultades», anunció.
«Eso nos va a permitir pillar con mayor facilidad a quienes organizan delitos desde las cárceles. En particular, estamos ampliando el delito de extorsión, que es aquel que incluye casos que, mediante violencia o intimidación, se empuje a una persona a cometer a una persona a cometer actos delictuales», agregó.
Finalmente, la máxima autoridad del país lamentó que el delito de sicariato «no está lo suficientemente bien regulado. Y por lo tanto, estamos estableciendo sanciones penales para quienes conspiren para cometer un sicariato, independiente de si este no se ejecuta».
«El solo hecho de planear un crimen de estas características ya es un delito. Si alguien contrata a alguien, o mediante cualquier tipo de ánimo de lucro, lo insta a cometer un crimen de estas características, tiene que ser sancionado penalmente», complementó.
Al concluir, Boric remarcó que «esto no es solamente persecución penal, no es solamente represión. Tenemos que pensar que la delincuencia se combate con mano firme y también -y es algo que en Peñalolén llevan la delantera a nivel nacional- con deporte, con cultura, mejorando la educación».